¿Qué terapia elegir?

GETAFE/Rincón psicológico (30/11/2016) – Hace unos días en nuestro artículo del despertar hacíamos una diferenciación entre psicoterapia y terapia psicológica, recordando brevemente que la terapia psicológica es aquella llevada por un psicólogo especializado en clínica que trabaja en colaboración directa con servicio de psiquiatría o no según se requiera. Normalmente sus campos de actuación suelen ser trastornos clínicos como una depresión, ansiedad, trastorno psicótico, adicciones, abusos sexuales etc.

En psicoterapia el profesional puede ser sanitario o no, los campos de actuación son amplios no abordándose la psicopatología clínica, se trata de un trabajo mayormente de desarrollo personal donde el usuario explora contenido de sí mismo y sea relación con el mundo que le rodea. Esta podría ser una clara diferenciación entre una terapia y otra, es decir, el contenido a trabajar.

Resulta difícil cuando uno decide ponerse en tratamiento elegir un terapeuta u otro, el desconocimiento es amplio y los servicios sanitarios a los que estamos acostumbrados desconocen de hecho muchas veces también el tema, es por ello por lo que deberemos seleccionar en base a nuestro criterio de trabajo un terapeuta u otro.

Es importante que nos informemos a través de amigos, sanitarios, familiares o compañeros del tipo de terapeuta que es, que informemos de su forma reglamentaria de trabajar, ya que nos pondremos en manos de un desconocido al que abriremos lo más vulnerable de nosotros, nuestro propio yo.

Haré un breve resumen de las terapias más comunes que nos encontraremos:

• Psicoanálisis… se trata de una orientación donde el terapeuta no dirige al paciente. El terapeuta permite hablar al paciente sobre el tema que en ese momento desee, le inquiete o simplemente le apetezca. A veces el terapeuta también puede proponer un tema si lo considera. Una de las técnicas más conocidas con las que se trabaja es el análisis e interpretación de sueños. El terapeuta suele sentarse de espaldas al paciente para que este no se sienta intimidado a la hora de expresarse. Algunos terapeutas hacen uso del conocido diván de Freud.
• Cognitivo Conductual… es la orientación más conocida con la que muchos psicólogos trabajan. Se trabaja directamente con la conducta introduciendo poco a poco la parte cognitiva y emocional. Aquí el terapeuta es directivo y propone pautas de acción y diferentes estrategias prácticas al paciente para que pueda continuar con una vida normal. Se trabaja con ejercicios para casa, las llamadas tareas, y el compromiso es bilateral. Es una orientación muy eficaz para tratamientos de fobias, ansiedades, trastorno obsesivo compulsivo, etc.. ya que provoca en el paciente una participación activa en su día a día con un programa estructurado con muy buenos resultados. Aquí paciente y terapeuta trabajan con una mesa, uno frente al otro.
• Humanista… es una de las orientaciones más de moda en estos tiempos. Se trata de realizar una exploración interna de uno mismo. Una de las orientaciones es la Terapia Gestalt donde se proponen ejercicios dinámicos, creativos, que hagan a uno navegar por las profundidades de su propio océano. Las sesiones son variadas, puede trabajarse con teatro, pintura, danza, haciendo partícipe activo al paciente. Se trata de una búsqueda interna profunda donde uno es capaz a de explorar sus miedos, dificultades, y se permite traspasarlos.

Podríamos hablar de otras muchas orientaciones psicológicas pero son estas tres las que englobarán el resto.

Por tanto a la hora de decidirse por una o por otra el usuario podrá hacerse una serie de preguntas que le ayudarán en la toma de decisión:

• ¿Cuál es el motivo por el que me planteo ir a terapia?
• ¿Qué es lo que quiero o me gustaría trabajar?
• ¿Qué orientación va más conmigo por mi forma de Ser?
• ¿Actualmente o anteriormente he tomado algún tipo de medicación Psiquiátrica?
• ¿De cuanto tiempo dispongo para estar en el proceso TERAPÉUTICO?
• ¿Cómo me siento en este momento?
• ¿Me siento más cómoda con un chico o chica como terapeuta?
• ¿Qué espero de la terapia?
• ¿Que me gustaría encontrarme?
• ¿Estoy preparado, dispongo de la motivación suficiente para iniciar terapia?

Muchas veces intentamos aclaramos con preguntas del tipo POR QUÉ y nos olvidamos del PARA QUÉ.

Exploremos en nosotros mismos qué es lo que buscamos en ese momento entonces, tomémonos nuestro tiempo y no nos precipitemos. Investiguemos, exploremos, y sintamonos cómodos en el proceso de búsqueda. El tiempo hay que respetarlo. Que no nos importe al ponernos en manos de un terapeuta preguntar lo que necesitemos, comprobar titulaciones, etc.. vamos a iniciar una AVENTURA con nosotros mismos y como todo buen viaje requiere una preparación y un sentirnos seguros y confiados. Preparemos el terreno con el mayor de los respetos hacia uno mismo y DISFRUTAR DEL APASIONANTE VIAJE AL INTERIOR.

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