Jennifer Lavigne, las mejores manos para las cejas

El pase de diapositivas requiere JavaScript.

GETAFE/Look total (23/04/2021) – Aunque los ojos sean el espejo del alma es imposible negar que el aspecto de una persona puede cambiar radicalmente según la forma de sus cejas. No se trata solo de una cuestión de estética, lo cierto es que existen múltiples motivos por los que se puede perder pelo en las cejas: desde un exceso de depilación, pasando por una dermatitis seborreica o una psoriasis, e incluso se dan casos de alopecia frontal fibrosa en esta zona.

Por suerte, las opciones para camuflar la falta de vello en las cejas son cada vez más: desde el maquillaje, que ya cuenta con fáciles herramientas para el contouring de cejas, hasta el tatuaje semipermanente. Sin embargo, cada vez más personas optan por una solución más a medio plazo y con un resultado más natural (sobre todo si se observa al detalle): el microblading.

El microblading es uno de los tratamientos más demandados en los centros de belleza últimamente. Y es que conseguir unas cejas más gruesas y definidas se ha convertido en la obsesión de muchas mujeres. Pero, ¿compensa someterse a este tratamiento? Las cejas nos traen de cabeza a muchas mujeres. La genética, la edad, alguna enfermedad o haberlas depilado mucho en el pasado son factores que pueden hacer que tus cejas sean finas, tengan calvas e incluso hayan perdido su forma. Es cierto que cada vez hay más cosméticos, muy fáciles de usar, que nos ayudan a dar la forma deseada a nuestras cejas, a definirlas, a rellenar las calvitas y a que parezcan más gruesas, en definitiva. Pero, también hay técnicas estéticas que pueden hacer que tus cejas sean más perfectas, y así te olvidarás de maquillarlas a diario. Entre ellas quiero hablarte de este proceso, porque desde hace algún tiempo, mis visitas a Conceptos de Belleza (C/Perales 3. Getafe) no me traen más que alegrías y tengo que compartirlas con vosotros. 

María, que ya os hablé de ella en otra ocasión, al verme las cejas no dudo ni un instante en presentarme a Jennifer Lavigne, especialista en cejas (www.jenniferlavigne.com), si veis sus trabajos no se puede dudar de su talento (IG: jenniferlavignepmu) y la perfección de cada uno de ellos, y como no, me puse en sus manos de inmediato…He de decir que es una de las mejores cosas que he hecho, el cambio para bien en la mirada es espectacular y la comodidad de sentir la cara más definida sin maquillaje, es una pasada… (Os podéis poner en contacto con ella a través de su instagram, web o en Conceptos de Belleza donde acude a realizar trabajos varios días al mes)

¿Qué es el microblading?

Se trata de una técnica de maquillaje semipermanente que permite lucir unas cejas más gruesas, sin perder su naturalidad. Jennifer Lavigne me explica que el microblading «consiste en introducir moléculas de pigmento en las capas subepidérmicas de la piel, mediante pequeños trazos. La primera sesión dura unas dos horas y media, porque es un trabajo manual. Con la ayuda de una pluma, se va depositando el pigmento, pelo a pelo, en la piel, mediante unas agujas finas que provocan unos cortes pequeños. Ella me aseguró, y yo doy fe, de que «es un método de fácil realización y rápida cicatrización, que sirve para dar forma, rellenar la cejas en aquellos puntos en los que sea necesario, y espesarlas u oscurecerlas, dándoles una forma más definida». Aunque es parecida a la micropigmentación (maquillaje permanente) se diferencia en su duración, el microblading no es para siempre, también en que es menos doloroso, y en el resultado, que es más natural.

El microblading, paso a paso

El primer paso es acudir a un centro de belleza que te ofrezca confianza y huir de ofertas lowcost. Así te aseguras que el pigmento que usan está homologado y que el profesional está cualificado. Además, es aconsejable que el profesional sepa de diseño de cejas para que pueda recomendarte el que más se adapta a tus facciones. Independientemente de las tendencias, las cejas deben tener concordancia con tu rostro para que consigan su objetivo: enmarcar tu mirada y aportar equilibrio al rostro. Por eso el grosor y la forma de las cejas debe ser algo personal, que no debemos imitar. Después de haber estudiado tu rostro y dar con el diseño más favorecedor, Jennifer realizó una simulación con lápiz para ver el resultado final. Algo muy recomendable, ya que aunque el microblading no es definitivo, su duración puede ser de hasta un año. Así que cuanto más segura estés de que el resultado es el que buscas, mejor. También es importante escoger el pigmento más adecuado para ti, teniendo en cuenta el color de tu pelo natural, de tu piel y de tus ojos. (Ah! Y no solo es válido para mujeres, tener unas cejas bonitas vale para todos.)

Pasado un cierto tiempo durante el proceso me aplicó anestesia tópica. Así se reducen las molestias. Cuando ya ha hecho efecto, empieza el trabajo de diseñar y rellenar las cejas, pelo a pelo, realizando cortes superficiales en la piel con una pluma, en cuyo extremo hay unas agujas muy pequeñas. En los cortes se va depositando el pigmento. Después, se cubre la ceja por completo con color para que la piel absorba bien el pigmento. Una vez terminado el proceso, se retira el exceso de pigmento y se aplica una silicona médica para cubrir la piel. Aunque las cejas parecerán más oscuras de lo esperado, se van aclarando en las siguientes semanas. Además, se recomienda un retoque pasadas unas 4 semanas para completar las zonas que hayan podido quedar sin pigmento.

¿Necesitas cuidados posteriores?

Sí, aunque son muy sencillos. Jennifer, aconseja «lavarse las cejas durante la primera semana solo con agua además de no rascar ni frotarlas». Después, ya puedes usar tu crema facial habitual, pero es importante que «utilices protección solar siempre, para que el tratamiento dure más tiempo, ya que el sol va degradando el color. Recién hecho el microblading, no conviene exponerse al sol directamente en unos días.

Ventajas y desventajas del microblading

Entre los pros de esta técnica, destaca que es un tratamiento con un acabado natural. No requiere retoques, excepto el primero, pasado un mes. Su duración es de 9-12 meses en los que no tendrás que utilizar maquillaje porque tus cejas estarán perfectas. Al aplicarse de forma superficial, no hay riesgos, siempre que te pongas en manos de un profesional.

Y entre los contras del microblading sobre todo el hecho de que no debes exponerte al sol de forma directa durante los primeros quince días. Con el tiempo el color se va degradando y quizás no te encuentres muy a gusto. Pasado un año, tendrás que volver a realizártela.

Sin duda ponerme en las manos de Jennifer es algo que recomiendo 100%, una profesional en la técnica y que desde el primer minuto te hace sentir súper cómoda y segura. Os dejo mi proceso y si tenéis dudas, os animéis porque merece mucho la pena. 

Mucho ánimo y ¡HASTA PRONTO! [Y siempre, siempre, siempre… Diviértete combinando]

«La simplicidad es la clave de la verdadera elegancia»

Redacción Getafe Capital