Cuidados de la piel en invierno de las personas mayores

GETAFE/Varios (08/11/2022) – La piel es el órgano más extenso del cuerpo humano,  por ello es de vital importancia mantenerla cuidada y en buenas  condiciones. En el caso de las personas mayores, a menudo nos olvidamos  de que su piel requiere de una atención más profunda, puesto que la edad y el envejecimiento traen consigo que sea más sensible a todo tipo de afecciones.

La llegada del frío también tiene un impacto importante en la piel, por lo que es necesario que las personas mayores dispongan de una buena atención a la hora de mantener su piel sana. La atención profesional, como la que ofrece Residencia Palacios, es una buena opción para asegurarse de recibir todos los cuidados necesarios para una piel saludable y más joven.

¿Cómo afecta el frío a la piel?

Llega el invierno y, con la bajada de temperaturas, la piel sufre las consecuencias del frío, por lo que hay que hacer mayor hincapié en su cuidado y más especialmente en el cuidado de la piel en las personas mayores, la cual es más vulnerable a todos estos efectos negativos.

Con el frío, el ambiente se vuelve más  seco, ya que la humedad relativa desciende. Esto, sin los cuidados  correctos, puede producir deshidratación, sequedad y pérdida de colágeno en la piel, favoreciendo así la aparición de manchas, arrugas, descamación o picor.

A esto se le suma el hecho de que el  invierno es una época donde la sensación de sed es menor y bebemos menos  líquido, haciendo que la hidratación de la piel sea menor también. Las personas mayores tienen un riesgo aumentado,  puesto que es muy frecuente que no sientan sed cuando en realidad su  cuerpo lo requiere. Esto es un problema en verano con las altas  temperaturas por el riesgo de deshidratación, pero también en invierno,  ya que en ese periodo la piel sufre más las condiciones climáticas.

Por otra parte, el rostro y las manos son las zonas más delicadas y que más sufren cuando descienden las temperaturas, puesto que suele mantenerse al descubierto y menos protegidas.

Cuidado de la piel en las personas mayores: recomendaciones

Existen muchas soluciones que podemos poner en práctica para cuidar la piel en época de frío y minimizar así el impacto de las bajas temperaturas:

Limpiar la piel

Especialmente el rostro, es importante  lavarlo con agua y jabón neutro un mínimo de dos veces al día. El agua  micelar es también una opción adecuada, especialmente para las mujeres mayores que utilicen maquillaje. Es importante evitar los productos que contengan alcohol, ya que favorecen la sequedad de la piel.

Hidratación

La hidratación es una de las medidas más importantes a la hora de cuidar la piel. Lo más adecuado es que el anciano beba al menos 2,5 litros de agua diarios y que consuma frutas y verduras con frecuencia.

También es recomendable que la persona mayor evite el agua demasiado caliente al ducharse y que, posteriormente, se aplique una crema hidratante.

Hábitos saludables

Muchos hábitos en la vida diaria tienen su impacto en la piel. Es muy importante que la persona mayor mantenga un buen descanso con las suficientes horas de sueño.

De igual manera, realizar ejercicio físico y actividades al aire libre tendrá un efecto positivo sobre la piel. Para que las personas mayores se encuentren motivadas y acompañadas existen muchas opciones como las actividades para mayores en Ciempozuelos.

Atención profesional

Una de las mejores formas de asegurarse de recibir un buen cuidado de la piel y la salud es mediante la ayuda profesional como la que se puede encontrar en una residencia tercera edad en Madrid.

La atención profesional garantizará la hidratación e higiene, la alimentación correcta, los  tratamientos médicos que se precisen, la actividad física y el ocio.

Con la ayuda profesional adecuada y los cuidados correctos se pueden minimizar los efectos negativos del frío en la piel de las personas mayores, logrando una piel más sana, reduciendo las señales del envejecimiento y sintiéndose mejor con uno mismo.

Redacción Getafe Capital