La perla negra de Oriente

En la antigua Mesopotamia (hoy Israel y Jordania) las mujeres sabían que el secreto de su belleza estaba escondido en un tesoro natural llamado Mar Muerto. Las chicas aplicaban el barro del Mar Muerto (rico en microelementos y minerales) sobre su rostro y cuerpo, gozando de una piel de porcelana, con estructura suave y fina como la seda. El barro del Mar Muerto elimina las toxinas de la piel, tiene un efecto exfoliante, actúa eficazmente contra eczemas y todas las formas de psoriasis y es una terapia estupenda contra la celulitis, enfermedades cardiovasculares y reumáticas, además ayuda a  reducir las manchas de acné y las estrías. Debido a esto es conocido como «la perla negra del Oriente».

Flotando en sus aguas entendemos que Cleopatra, reina de Egipto, pidera a Marco Antonio que conquistara la baja Jordania para poder relajarse y aprovechar para ella solita las propiedades naturales que la zona ofrecía. Cleopatra creía haber encontrado la fuente de la eterna juventud. Marco Antonio no solo conquistó la zona sino que hizo que se crearan allí los primeros balnearios que, lógicamente, fueron para su uso y disfrute.

Pero Cleopatra sabía de sus propiedades saludables porque ya los egipcios las habían descubierto. De hecho, algunas momias fueron embalsamadas con barro de las orillas del mar Muerto, confiando en que se produjera el milagro.

El barro del Mar Muerto normaliza todas las funciones básicas de la piel. Purifica, absorbe el exceso de grasa, elimina las células muertas de la piel y libera los poros de la secreción de sebo. Todo esto predispone la piel para absorber la totalidad de las sustancias biológicamente activas del barro. El resultado: una piel más joven y sana. La acción de los componentes del barro aumenta el metabolismo de las células cutáneas, estimula la circulación, reduce la irritación y la inflamación, las arrugas y retarda el proceso de envejecimiento.

El barro del Mar Muerto se puede aplicar en ciertas áreas del cuerpo (tópica) o todo el cuerpo (uso general).

Forma de administración:

• Antes de aplicar el barro, date  una ducha caliente para preparar la piel para el tratamiento. Calienta 100-150g de barro a baño María, no en microondas, a una temperatura de 40-45°C.
• Aplicar el barro en los pies, la espalda, manos (incluyendo la parte posterior de la mano) y la parte frontal del cuerpo (excluyendo la zona del corazón y las glándulas tiroides).
• Siéntate y relájate en una habitación oscura con música tranquila durante 20-25 minutos.
• A continuación, dúchate sin gel de ducha ni jabón.

Barro del Mar Muerto contra la celulitis.

Barro Mineral del Mar Muerto con acción anticelulítica activa. El procedimiento no se puede realizar más de una vez por semana. Durante el procedimiento, el barro mineral  dilata y mejora la microcirculación. Los minerales son absorbidos intensamente por las células. Todo este proceso  tonifica y fortalece la piel. Aumenta su flexibilidad, elasticidad y suavidad.

Como hacerlo: frotar la piel con un cepillo para que se enrojezca  ligeramente. Esto es necesario con el fin de mejorar la absorción de los componentes del  barro. Después, aplicar el barro, su temperatura  debe ser de 40-45 °C, durante un máximo de 30 minutos. Seguir masajeando ligeramente con el cepillo y dejar que el barro se seque. El curso consta de 12 a 15 procedimientos.

El barro del Mar Muerto no debe utilizarse:

* En casos de cáncer.
* En casos de fibromas y tuberculosis pulmonar en una forma activa.
* En casos  de  angina de pecho.
* Inflamación de las glándulas  tiroides.
* Después de infarto de miocardio reciente.
* En la segunda mitad del embarazo no debe usar ningún tratamiento de  barro mineral.

Afortunadamente, “la Perla Negra» ya no es solo un privilegio de las chicas de Oriente, en M Fragancia disponemos de una gama amplia de productos del Mar Muerto.

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Y recordad: la felicidad es inseparable de la belleza y la salud. Los hábitos saludables, la capacidad de relajarnos y disfrutar de las cosas  pequeñas, todos son componentes de la belleza y la salud; todos interconectados e interdependientes.