Una crisis sanitaria y un impacto social que nos está golpeando en el corazón

GETAFE/Palabra de concejal (06/04/2020) – Nos encontramos en una situación de emergencia como nunca habíamos vivido, esta es una crisis sanitaria global. Nos hemos ido haciendo conscientes de la gravedad de la situación según han ido pasando los días y hemos visto como amigos cercanos o familiares han ido falleciendo. Lo que en un primer momento nos parecían medidas exageradas hoy las analizamos como insuficientes. Nadie podía prever a lo que nos estábamos enfrentando.

A la tristeza y preocupación por el número de fallecidos se ha ido sumando la impotencia ante la falta equipos sanitarios y medios de protección, y las condiciones que nuestros sanitarios y el resto de profesionales, que nos están asegurando la alimentación, transporte de mercancías, el cuidado, o el cumplimiento de las restricciones a nuestra movilidad, están teniendo para desarrollar su trabajo.

AFRONTAR LAS TENDENCIAS PRIVATIZADORAS

Hay responsables y no vamos a perdonar la falta de medios para salvar vidas en que nos encontramos. Las políticas privatizadoras de la derecha, que venimos sufriendo desde hace décadas, especialmente desde el gobierno de la Comunidad de Madrid. Sus políticas de recortes y privatizaciones de los servicios públicos, para asegurar el negocio de sus amigos de la derecha económica, esa que gobierna en la sombra y no se presenta a las elecciones. Los que han diseñado un modelo sanitario que tiene que ir funcionando cada vez peor para facilitar la incursión de los seguros y hospitales privados. Los que han construido un modelo de atención en residencias de mayores, mayoritariamente privatizado, que mantiene unas condiciones de atención inhumanas, que esta crisis sanitaria ha sacado a la luz en toda su crudeza.

En este país, nos han puesto ante el espejo de nuestra debilidad colectiva, y también como ciudadanos europeos, que dependemos de la producción de material básico de protección, o equipos respiradores, de lo que nos llegue del exterior, en un momento en que se están imponiendo unas condiciones de “libre mercado” para seguir haciendo negocio, aunque sea con la vida de las personas.

NECESIDAD DE RECONSTRUIR SOCIEDAD

Como muy acertadamente nos recuerda Naomi Klein la salida de esta situación de crisis no puede ser volver a la normalidad. En estos momentos hay que poner los medios para que las repercusiones sanitarias y de fallecimientos sean las menores posibles, pero también hay que pensar en cómo reconstruimos la sociedad una vez que el coronavirus nos vaya dejando volver, poco a poco, a la actividad.

Hay que repensar el modelo social, la necesidad de disponer de recursos colectivos. Cuando podamos salir a la calle para abrazarnos y besarnos nos vamos a encontrar o bien con una sociedad más solidaria y con menos miedo de exigir lo justo o con una sociedad todavía más miedosa e individualista. En cualquiera de los dos casos va a ser más necesario que nunca volver a convocarnos en defensa de lo público, de lo colectivo, de lo de todos y todas, de los cuidados. Nadie nos va a regalar nada.

NECESITAMOS CAMBIOS PROFUNDOS EN NUESTRAS PRIORIDADES COMO SOCIEDAD

Vamos a tener que elegir entre la ortodoxia económica de los recortes o la vida de las personas. El gobierno central tendrá que cambiar el marco legislativo que se aplica a los presupuestos municipales, retirando las limitaciones impuestas por la derecha a los ayuntamientos, en cuanto a gasto y endeudamiento. La Comunidad de Madrid tendrá que poner a disposición de las personas los recursos de que disponga. El Partido Popular en la Comunidad de Madrid no puede seguir haciendo política para gestionar los recursos públicos en función de si benefician los negocios privados de sus amigos, sino gestionarlos para el beneficio de la mayoría. Necesitamos un sector público fuerte que garantice que los recursos de todos se están gastando para mejorar la vida de las personas.

Nuestro sistema sanitario necesita más inversiones, más personal, en definitiva más recursos y también más investigación. Por otro lado, hay que repensar el modelo de atención a nuestros mayores, priorizando las ayudas a domicilio para que la entrada en residencias de personas mayores sea la última opción, cuando no sea posible recibir la atención adecuada en su propio domicilio. Por otro lado, nuestros mayores no pueden seguir sufriendo el trato inhumano que las residencias, mayoritariamente en manos privadas, les han venido ofreciendo. No cabe otro camino que la construcción de un sector público de residencias de mayores que asegure unas plantillas de personal que garanticen la calidad en la atención y el trato adecuado. Ya lo sabemos, lo hemos comprobado en esta profunda crisis sanitaria, la atención a los mayores tampoco debe ser un campo para el negocio privado, que pone el beneficio económico por delante del cuidado de las personas.

La alarmante destrucción de empleo que ha provocado esta crisis, que recae mayoritariamente sobre los que ya sufrían la precariedad, profundiza una brecha que no puede resolverse sin derogar la perniciosa reforma laboral y establecer un nuevo modelo de relaciones laborales.

EN GETAFE NECESITAMOS UN PLAN «QUE NO DEJE A NADIE AL MARGEN»

Desde Más Madrid Compromiso con Getafe pensamos que en nuestro municipio hay que diseñar un plan de ayuda a los que más lo van a seguir necesitando y que se va a tener que alargar en el tiempo. Un plan que debe basarse en la transparencia y la participación de todos y todas. Al mismo tiempo, también se van a tener que tomar decisiones en el terreno económico en forma de ayuda a pymes y autónomos, para reactivar la actividad productiva y la actividad comercial de cercanía y local. Vamos a necesitar de todos los recursos para no dejar a nadie al margen.

Se debe asegurar la protección de los profesionales que nos siguen prestando sus servicios: Servicios de ayuda a domicilio, recogida de residuos, servicios sociales, policía local y protección civil. De igual manera se deben reforzar las plantillas de la red básica de servicios sociales para asegurar la atención básica a las personas y hogares vulnerables, incluyendo también a las personas sin hogar. Esto, sin duda, necesitará de una financiación excepcional. Se deben mejorar, o poner en marcha convenios de colaboración con las asociaciones u organizaciones que están siendo imprescindibles para la distribución de alimentos y productos de limpieza, así como asegurar los servicios de compra a domicilio para personas mayores o en situación de dependencia. Tenemos que agilizar la tramitación de las rentas mínimas de inserción y acometer medidas de carácter fiscal y económico y seguir coordinando las iniciativas voluntarias para asegurar su eficacia y publicidad entre la población de Getafe.

Solo si construimos otro modelo social más sostenible en lo ambiental, más seguro en lo sanitario y más responsable con los cuidados que todos y todas necesitamos, saldremos reforzados y con garantías de que acometemos el futuro en la dirección que nuestros mayores y también nuestros pequeños van a seguir necesitando para vivir una vida que merezca la pena compartir.

Redacción Getafe Capital